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Writer's pictureMarta Tiana

¿Por qué los medios aún son machistas?

Updated: Sep 25, 2021

En el Estado Español las mujeres solo son el 26% de los sujetos sobre los que se informa en prensa, radio y televisión; en prensa digital y redes sociales, el 31%. Y por no hablar de personas con identidades de género no binarias, que no se las incluyen en los estudios de medios con perspectiva de género. En este artículo te explico por qué los medios son machistas, pasando por quiénes y cómo se explican las notícias hasta por las redes sociales como nidos de hunga-hungas.

Mujeres sujetos y fuentes de los medios (GMMP 2020)

Un retroceso en la representación

Hace veinte años que el Proyecto de Monitoreo Global de Medios (GMMP) analiza las noticias y la actividad de los medios de comunicación con perspectiva de género, un estudio realizado, a posteriori, cada cinco años. Y como en cada estudio que se ha publicado, los resultados de este año demuestran que los medios de comunicación siguen sesgados por género.


Representación de mujeres en los medios tradicionales por regiones (GMMP 2020)

El estudio de GMMP afirma que en el Estado Español las mujeres solo son el 26% de los sujetos sobre los que se informa en la prensa tradicional (escrita, radio y televisión), y en los diarios digitales y redes sociales el 31%. Datos que demuestran un retroceso en la representación de mujeres en los medios, dado que hace cinco años, en el último estudio de la GMMP los porcentajes eran del 28% y del 33% respectivamente. Datos que resultan preocupantes si tenemos en cuenta que en las universidades, la mayoría de las estudiantes de periodismo son mujeres.

Tardaremos 67 años en eliminar la brecha de género en los medios de comunicación, según GMMP

Aunque por primera vez des del 2010 parece que ha habido un ligero avance , puesto que ha aumentado la presencia de mujeres como fuentes de información expertas –que ha pasado del 9% al 34%–, este aumento es relativo. El estudio de GMMP apunta que a este ritmo, tardaremos 67 años para lograr la igualdad real en los medios de comunicación. Los medios de comunicación europeos son los que más han avanzado en materia de género en los últimos cinco años, en comparación con los africanos o los de la región del Pacífico, donde la presencia de mujeres en los medios ha disminuido casi tres puntos.

Presencia de mujeres en los medios tradicionales por temáticas (GMMP 2020)

Cuando analizamos quiénes dan las notícias por temáticas, la tasa de hombres continua siendo mayor (como el estereotipo indica) en las de ciencia, salud y economía. Y en un año donde los medios han estado reepletos d noticias sobre el Covid-19 (cerca del 40% de las informaciones, según el mismo estudio), la proporción de mujeres frente a hombres que tratan el tema en los medios, también da pena. En África, Asia y Oriente Medio han sido 2 de cada 10 (en algunas regiones puntuales, incluso menos) las mujeres que han informado sobre el Covid-19, y poco más del 20% en las regiones latinoamericanas y del Pacífico norte.


"Mientras sigan asesinando mujeres, mientras la historia de vida de cualquier mujer se vea frenada por el machismo, será necesario el periodismo feminista" - María Ruiz, periodista

Llamar las cosas por sus nombres

No todo es el techo de cristal. Los medios de comunicación son machistas porque la manera en la que se trata la información está aún muy ligada al patriarcado. Por ello hace años que hay medios que ponen énfasis en eliminar el machismo que los sucumbe. Sin embargo, tanto periodistas como líneas editoriales de determinados canales, continuan promoviendo estereotipos de género de manera sesgada. Casi por costumbre. ¿Cuántas veces los medios no se han referido a feminicidios como 'crímenes pasionales'? Cuando ha habido una agresión sexual, ¿cuántas veces no se ha culpabilizado a las víctimas por la manera de vestir o por si habían tomado alcohol? Ninguna mujer muere sola. Ni es su culpa por estar borracha. Las matan y las violan y a los medios, les cuesta reconocerlo.

Hay una reticencia enorme en llamar las cosas por sus nombres, en especial frente a crímenes machistas, racistas, lgtbifóbicos (y etc). Elena de la Vara, jurídica y activista, defiende des de Tribuna Feminista que "[si] analizamos el tratamiento mediático [del cuerpo de la mujeres], desde el acoso en Hollywood hasta las manadas españolas, observaremos una nula referencia a cualquier sistema ideológico, teórico y político que analice, ponga nombre y solución a tales conductas, es decir, ninguna referencia al feminismo más que para utilizarlo como reclamo mercantil."

Me hace pensar en el reciente Caso Samuel, un joven que fue brutalmente asesinado al grito de 'maricón'. Un asesinato, claramente homófobo, del que los medios (y tristemente, familiares) aún reniegan en calificar. Los sectores de la ultraderecha, más conservadores y retrógradas que otra cosa, han pedido que no se 'politice' el asesinato. ¿Cómo no hacerlo si la misma Policía y varios medios de comunicación niegan que la razón principal de su muerte fuese una manada de homófobos fascistas? Negar que el crimen es homófobo es politizarlo y es normalizar la homofobia y violencia que pone en riesgo a las personas del colectivo LGBTIQ+ todos los días.


Que los medios se refieran a este asesinato como 'la muerte de samuel', en lugar de 'asesinato'; que cada vez que una mujer es asesinada por ser mujer no se mencione que fue un feminicidio; que haya agresiones sexistas o racistas y no sean tratadas como tal... Todo esto fomenta el patriarcado y la violencia institucional, sistémica e histórica contra mujeres y disidencias. En México, el Estado Español y en todas las partes del mundo.

Este artículo de El País, por ejemplo, asegura que en la televisión mexicana hay dos muestras de machismo por cada hora de programación. Esto en un país que sólo en su capital, la Ciudad de México, se registran 10 feminicidios al día. Según Aimée Vega Montiel, Investigadora del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias de la Universidad Autónoma de México (UNAM), en las 544 horas de programación de los canales televisivios mexicanos que se estudiaron, se encontraron más de 900 muestras de violencia de género contra mujeres y niñas tanto en los programas informativos como en shows infantiles, telenovelas, tertulias y concursos. Machismo apto para todos los públicos. Muestras que van des de la hipersexualización, hasta el tratamiento de la información.


Las redes sociales: un nido de hunga-hungas

Otro caso que me pone los pelos de punta, es el del tiktoker español Naim Darrechi, quien tras aceptar haber abusado sexualmente de mujeres en una entrevista online, su cajón de más de 26 millones de seguidores en esta red social–la mayoría menores de edad– sigue casi intacto. Hoy les influencers son –casi– un medio de comunicación andante, por sus grandes altavoces y el impacto que llegan a causar. Si bien hasta este punto hemos visto como el machismo prolifera en los medios de comunicación, permítanme que les diga que en las redes sociales el macho aún vive en plena libertad. No solo se trata de personajes despreciables como Darrechi, sino que las redes están repletas de contenido muy misógino que va des de "enseñar a una dama a sentarse como señorita", hasta consejos amorosos 'para hombres' que incluyen "no mostrar el lado vulnerable a las mujeres" o que "a todas las mujeres les gustan los bad boys". La periodista Ana Bernal explica el caso Darrechi en su artículo para El Periódico: Influencers con carta blanca para el machismo.


Lo preocupante del tema es que les responsables de estas plataformas sociales deciden no censurar contenido sexistas pero sí los pezones femeninos: un ejemplo tonto pero ilustrativo. Ana Bernal explica por qué: "Hay una generación de jóvenes para quienes sus referentes no son ni de lejos los nuestros, sino un grupo de influencers, youtubers o tiktokers que hacen gala de su misoginia porque pueden permitírselo. ¿Por qué? Porque detrás de las redes sociales hay empresas. Y estas lo permiten por su número de seguidores. Y los seguidores dan dinero".


Que las redes sociales estén repletas de machismo no es sorprendente teniendo en cuenta los últimos datos en violencias machistas, lgtbifóbicas y demás. El Observatorio contra la homofobia denunciaba a penas hace unos días a través de un tuit, 127 agresiones lgtbifóbicas en lo que llevamos de año. En 2021 los feminicidios en México han aumentado un 71% –según este artículo de El País México– y en el Estado Español se han registrado 48 casos. Al final, el machismo en los medios es un reflejo de la sociedad. Los contenidos que se comparten en ellas están creados por las personas, y por tanto, mientras las personas sean machistas, los contenidos continuarán siéndolo.

La solución pasa por crear consciencia colectiva y gritarle al mundo qué está pasando: que nos estan matando. Por ello, cada vez hay más periodistas y medios –e incluso, influencers– que se especializan en feminismos. Entre elles, Píkara Magazine, La Marea, El Crític, La Directa, Ràdio Orgull... muchos y muy variados –y los que me dejo–, todos con perspectiva de género e intersecional. Pero la existencia de estos solo prueba una cosa: algo va mal. No harían falta informaciones 'con perspectiva de género' si no hubiera un machismo de trasfondo que sirviera de motor principal. Mi madre siempre dice que mientras sigamos viviendo en el patriarcado, este blog tendrá completo sentido: será necesario. El punto no es buscar un cambio de paradigma, porque solo des de los medios no se va a cambiar al mundo. También necesitamos prácticas políticas, activistas y transversales que huyan del patriarcado. El trabajo de los medios es denunciar qué esta pasando, decir las cosas por su nombre, poner énfasis en el tratamiento de la información. Escribo esto pensando en la típica frase de: la información es poder, y todo lo demás. ¡Y cuánta razón!


Que les periodistas no estén capacitades en materia de género, hoy en día, es por pura ignorancia: es porque así quieren que sea. La información que hay al respeto es muchísima, aunque no sobra. Las personas con acceso a la información que deciden no deconstruir los ideales con los que han crecido –el cisheteropatriarcado racista–, son personas que viven bajo un sesgo mediático, las mismas que defienden la impunidad de los agresores y violadores des de sus privilegios. (Hashtag: amiga, date cuenta).


Los medios son machistas porque no cuentan con una participación justa entre hombres y mujeres, y ni siquiera tienen en consideración expertes no binaries. Son machistas por la manera en la que tratan la información y en la que deciden abordar determinados aspectos sociales. Pero los medios son misóginos porque la sociedad lo es. Se publican las noticias que interesan a la audiencia. Se publican las informaciones capitalizables. Y en una sociedad machista, se consumirán productos mediáticos patriarcales.




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